Santo Domingo:

El viernes por la tarde, alrededor de las 6:50, Sergio Luis Feliz, su pareja y otros familiares llegaron a la Funeraria Blandido para velar a su hijo Giosier Feliz, de nueve años, quien perdió la vida por una bala perdida.

Cuando se le preguntó sobre su amigo Tomás Espinal, alias «Tomacito», quien está acusado de coordinar el asalto a Feliz y su familia mientras se dirigían hacia la comunidad de Villa Vázquez en Montecristi, el padre lo describió como «parte de su familia».

«Lo quería como a un hermano», dijo.

El padre expresó que se sintió «mal» cuando recibió la noticia de que su amigo estaba involucrado en el intento de asalto que resultó en la muerte de su hijo.

«Cualquiera se sentiría mal; es alguien en quien uno confía», afirmó el padre.

Luis Feliz también dijo que mantenía una comunicación constante con Espinal, pero negó haberle contado detalles sobre su viaje al país.

«Pero, hay un Dios arriba», dijo el padre mientras señalaba al cielo con sus manos.

Mientras caminaba hacia la capilla donde se encuentra el cuerpo de su hijo, informó que la próxima semana será trasladado a Estados Unidos.