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Al fallecer aplastado por la pared que se derrumbó en el paso a desnivel de la Avenida 27 de Febrero el pasado 18 de noviembre, Bonheur Dorvilien cargaba consigo los documentos de su esposa embarazada y de sus hijos, así como un dinero que había cobrado de un san.

En medio del dolor que le embarga, Baby Love Dorvilien, esposa de , Bonheur, solicitó ante las cámaras de N Investiga una mano solidaria para poder dar con los documentos de su familia. No tenía esperanza de que también se le devolvería el dinero en efectivo que había en la cartera.

Luego de ver el reportaje presentado en N Investiga, el mayor Otto Manuel Geraldino Obritzhauser, del Cuerpo de Bomberos del Distrito Nacional, a través de la producción del programa hizo contacto con la familia de Bonheur Dorvilien para comunicarle que la cartera fue encontrada en el lugar del hecho y estaba en su poder.

La humilde vivienda donde reside Baby Love junto a sus 4 hijos.

Este jueves finalmente Baby Love Dorvilien vio una luz en medio de todo. Recibió todos los documentos que se encontraban en el pequeño bulto, así como la suma total del dinero que su esposo había cobra en un san el mismo día que perdió la vida, y que sería utilizado para realizar mejoras en la vivienda de la familia y preparase para llegada de su último retoño.

La tragedia del 18 de noviembre

La tarde del 18 de noviembre se desplomó una pared en el paso a desnivel de la avenida 27 de Febrero con Máximo Gómez, que cobró la vida de 9 personas; el cirujano urólogo dominicano Eduardo Cabrera Castillo, el comerciante dominicano radicado en Puerto Rico, Ramón Martínez, su esposa, Awilda Martínez, su hija, María Nereyda Martínez y el fiscal puertorriqueño Maykoll Orozco.

El derrumbe también llevó el luto a Las Colinas de Baní; donde fallecieron dos haitianos, Bonheur Dorvilien y Nancy Joseph, quienes estaban en el vehículo junto a María Reyes y Wilson Santana, sobrevivientes.

Los 9 fallecidos y los dos sobrevivientes regresaban del Aeropuerto Internacional Las Américas (AILA), unos de dejar familiares, y otros de llegar a República Dominicana para celebrar la vida.

Ese mismo día unas 21 personas más perdieron la vida a causa de las torrenciales lluvias que se registraron el país, y que además, dejó miles de casas inundadas.